

Las ceremonias de agua en las culturas ancestrales son rituales que buscan venerar, agradecer y pedir a las fuerzas naturales por este vital elemento. El agua es una entidad sagrada y esencial para la supervivencia humana.

En el mundo quechua, las ceremonias en torno a la luna están ligadas a la figura de Mama Killa, quien es invocada en rituales de fertilidad y abundancia y para mantener el equilibrio cósmico.

El Solsticio de verano es una fecha llena de magia, donde algunos pueblos todavía celebran tradiciones milenarias y rituales de purificación, paso a la vida adulta o fertilidad, en los que el fuego es el protagonista.

La fiesta del Inti Raymi, cuyo nombre significa “Fiesta del Sol” en quechua, es uno de los eventos más importantes de la ciudad de Cusco. Se celebra cada 24 de junio, durante el solsticio de invierno, y en el 2001 fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación.